El especialista en Wedding Planner es alguien que debe contar con una serie de características para llevar a cabo correctamente sus funciones. Así pues, estas son algunas de las características que presenta este perfil profesional:
- Creatividad. Tener dotes de creatividad es de vital importancia para ser wedding planner. Y es que nadie quisiera tener la misma boda que su vecino o primo. Por ello, cada boda, pareja y evento deben ser 100% originales, cumpliendo con los deseos y necesidades de cada cliente.
- Dotes manuales. Generalmente, la wedding planner suele participar de la decoración, elección y confección de detalles, invitaciones y otras partes.
- Puntualidad. Cumplir con plazos fijados y ceñirse a la presión que ello supone es imprescindible para ser una buena wedding planner.
- Compromiso. Si no te apasiona el sector, las bodas y eres una persona romántica empedernida, olvídate de ser una persona comprometida. Solo aquellos que aman este ámbito podrán demostrarse profesionales comprometidos con cada uno de sus clientes.
- Capacidad de crítica. No todos los presupuestos pueden ser aceptables, no todas las ideas pueden desarrollarse. Un wedding planner debe ser creativo, comprometido y también realista: mostrarles y facilitarles con objetivos realistas el camino a los futuros novios es su cometido.
- Dotes comunicativas. Tener dotes de comunicación es de vital importancia, así como ser una persona empática.
- Capacidad de liderazgo. La wedding planner debe liderar el proceso de organización de una boda, por lo que debe ser una persona con capacidad de liderazgo e iniciativa.
- Escucha activa. Saber escuchar y responder a las necesidades de sus clientes es imprescindible, así como ser resolutiva.
- Ser social por naturaleza. Trabaja estando en contacto con multitud de personas, que deberá afrontar en diferentes situaciones y con diferentes momentos de estrés.