¿Sabes qué es una persona jurídica? En materia legislativa, es una figura o individuo con derechos y obligaciones. Ahora bien, este individuo no es una persona, sino una empresa, institución u organización. Como no puede ser de otra manera, las personas jurídicas deben cumplir una serie de leyes y normas. Por ello, una formación en compliance ayudará a evitar delitos que puedan causarse por desconocimiento.
Sigue leyendo porqué te contamos en profundidad en qué consiste una persona jurídica. También te explicamos qué delitos pueden atribuírsele y cómo se pueden prevenir. ¡Síguenos!
Índice de contenidos
Qué significa el término persona jurídica
Las personas jurídicas surgen para conseguir fines sociales o ciertos objetivos, con o sin ánimo de lucro. También ejercen sus propios derechos y deben cumplir con sus obligaciones. Eso sí, una organización de este tipo debe contar con un reconocimiento legal para ser persona jurídica.
El artículo 35 del Código Civil español define que las personas jurídicas son aquellas corporaciones, asociaciones y fundaciones de interés público. En el ámbito privado son asociaciones, empresas o cooperativas, entre otros, de interés privado.
Para entenderlo mejor pondremos un ejemplo. En el caso del ámbito privado, es la empresa quién asume todas las obligaciones y no solo el dueño o dueños. Esto implica que las deudas que pueda contraer se limitan a bienes que estén a su nombre, ya sea capital o patrimonio.
Ventajas y desventajas de una persona jurídica
Establecer una empresa como persona jurídica tiene un seguido de ventajas. A continuación te resumimos los principales:
- Tiene una responsabilidad limitada. En caso de deudas, solo se garantizan con bienes, capital o patrimonio de la propia compañía.
- Facilidad para acceder a créditos. Los bancos normalmente ofrecen más facilidades para conceder préstamos y mejores condiciones.
- Mayor disponibilidad de capital. En caso de ser varios socios, se convierte en una ventaja.
- Pueden acceder a concursos públicos sin muchas restricciones.
- Los miembros de la empresa pueden tener beneficios sociales y seguros.
Por otro lado, constituir una empresa como persona jurídica también tiene sus desventajas. Aquí te las mencionamos:
- Para crearla es necesario hacer muchos trámites. Además, se piden muchos requisitos.
- Es necesario hacer una gran inversión para su constitución.
- Deben presentarse muchos documentos contables.
- La administración, propiedad y control de la persona jurídica puede derivarse en varias personas.
- Es difícil liquidarla o disolverla.
- Si se quiere ampliar o reducir el patrimonio de la empresa, las restricciones serán varias.
Delitos que pueden atribuirse a una persona jurídica
Tras la reforma de la Ley Orgánica 1/2015, el Código Penal español establece que las personas jurídicas, entendiéndose como empresas, pueden atribuírseles hasta 24 delitos. Entre ellos destacan:
- Estafas.
- Delitos contra la propiedad intelectual e industrial, mercantil y consumidores.
- Blanqueo de capitales.
- Delitos contra la Hacienda Pública y Seguridad Social.
- Falsedad de medios de pago.
Otros de los delitos mencionados en el Código Penal hacen referencia al medio ambiente, salud pública e informática.
Cómo prevenir estos delitos
Para prevenir este tipo de delitos muchas empresas optan por contratar un Compliance Officer. Su función consiste en asesorar y hacer cumplir la ley a empresas u organizaciones para evitar los delitos mencionados anteriormente.
Además, la implementación de programas de prevención ayuda a crear una cultura de cumplimiento normativo. También proporciona mayor seguridad jurídica a todos los miembros de una empresa.
Diferencias entre persona natural y jurídica
A la hora de hacer algún trámite, debemos saber que persona natural y jurídica no es lo mismo. Por ejemplo, una persona natural puede desempeñar los derechos y obligaciones de una empresa a su nombre. Además, esta es responsable de las deudas de la empresa, mientras que en la persona jurídica se limitan a los bienes de la empresa
Por otro lado, una persona natural está formada por un solo individuo, mientras que la jurídica puede estar constituida por más de uno. En tanto que una persona jurídica requiere de un capital para su constitución, una persona natural no necesita demostrar un capital para ejercer su actividad.
Finalmente, una persona natural puede funcionar como microempresa o empresa individual. En cambio, una persona jurídica puede funcionar, por ejemplo, como sociedad anónima, colectiva, o de responsabilidad limitada.